En su primer día en el cargo el Intendente atendió a los representantes del movimiento que se oponen a los proyectos del borde costero tal como están contemplados hoy, y alertan sobre los peligros de su construcción.
Poco antes del mediodía llegaron hasta la Plaza Aníbal Pinto de Valparaíso representantes del Pacto Urbano La Matriz, movimiento ciudadano al que cada día se unen más porteños, y que ha realizado diversas acciones en oposición a los proyectos que se pretenden construir en el borde costero: Terminal2, VTP y Mall Barón.
Mientras se manifestaban pacíficamente fuera de la intendencia con lienzos y pancartas hacía su llegada el nuevo Intendente de Valparaíso, Gabriel Aldoney, para asumir su cargo. En medio del ajetreo la nueva autoridad regional se acercó a los manifestantes para escuchar sus demandas, y recibir en sus propias manos una carta en la que plantean su posición, ante lo que afirmó que: » a pesar de la diferencias de enfoque en este tema, es preciso conversar», por lo que se comprometió a sostener una reunión con ellos lo antes posible.
En declaraciones a medios de comunicación el ahora intendente ha manifestado que: «le parece curioso que un organismo internacional como la Unesco resuelva los conflictos que tenemos entre nosotros; no me cabe en la cabeza que no seamos capaces de sentarnos a la mesa y ponernos de acuerdo. Echo de menos que, en esta clase de situaciones, se convoque a un plebiscito y se pregunte la opinión de la gente», afirmó a principios de este año.
El gobernador de Valparaíso, Omar Jara, también estuvo presente en el encuentro entre el intendente y las organizaciones, recibiendo material gráfico e informativo con respecto a estas demandas ciudadanas.
Por su parte, el pintor Gonzalo Ilabaca, uno de los voceros del Pacto Urbano La Matriz, citó una de las partes de la carta entregada a Aldoney en la que solicitan una reunión “con el fin de analizar estos proyectos en el borde costero, tales como el Mall Barón, el terminal de Cruceros VTP y la expansión portuaria T2, para que pueda escuchar otras opiniones ciudadanas y de expertos en temas portuarios y patrimoniales, y principalmente en temas urbanos, pues es evidente que hoy, con la ejecución de estos tres proyectos, la ciudad corre un riesgo inminente que influirán en Valparaíso por los próximos 100 años y hacen también irreversible el deseo ciudadano de volver a tener una Costanera Abierta en el centro del Anfiteatro.”